En el ámbito empresarial, disolución y liquidación son dos conceptos que suelen confundirse, pero representan fases distintas dentro del proceso de cierre de una empresa. Comprender bien sus diferencias es clave para tomar decisiones correctas y cumplir con las obligaciones legales.
En este artículo explicaremos qué significa cada término, cuándo se aplica y cómo gestionarlos de forma ordenada con la ayuda de expertos como Gestores Concursales.
Contenido:
ToggleQué es la disolución de una empresa
La disolución es el acto legal que pone fin a la actividad operativa de una sociedad. No significa que la empresa deje de existir inmediatamente, sino que marca el inicio del proceso que conducirá a su cierre definitivo.
Durante la disolución, la empresa ya no puede realizar nuevas actividades comerciales, salvo aquellas necesarias para la liquidación de su patrimonio.
Causas habituales de disolución
- Cumplimiento del plazo de duración establecido en los estatutos.
- Acuerdo de los socios.
- Pérdidas que reduzcan el patrimonio neto por debajo de la mitad del capital social.
- Situación de insolvencia que derive en concurso de acreedores.
- Imposibilidad de lograr el objeto social para el que se constituyó la empresa.
En algunos casos, este proceso se gestiona a través de un servicio especializado como la disolución de empresas en España.

Te ayudamos a liquidar tu empresa con deudas
Cuando una empresa no puede continuar sus operaciones, la liquidación es el paso necesario para cerrar correctamente su actividad. Somos Mónica y Leticia, especialistas en liquidación y concursos de acreedores.
Qué es la liquidación de una empresa
La liquidación es la fase posterior a la disolución en la que se venden los activos, se pagan las deudas y se distribuye el remanente (si lo hay) entre los socios.
Durante la liquidación:
- Se confecciona un inventario y balance final.
- Se convierten en dinero los activos de la empresa.
- Se cancelan deudas con proveedores, trabajadores y acreedores.
- Se reparten los bienes sobrantes entre los socios.
Este proceso puede ser gestionado de forma ordenada mediante especialistas en liquidación de empresas que conocen los aspectos legales y fiscales implicados.
Principales diferencias entre disolución y liquidación
Aspecto | Disolución | Liquidación |
---|---|---|
Momento del proceso | Inicio del cierre | Fase posterior a la disolución |
Objetivo | Poner fin a la actividad empresarial | Convertir bienes en dinero y saldar deudas |
Actividad permitida | Solo actividades necesarias para liquidar | Venta de activos y pago de obligaciones |
Resultado final | La empresa entra en fase de liquidación | La empresa deja de existir legalmente |
Registro mercantil | Se inscribe el acuerdo de disolución | Se inscribe la extinción definitiva de la empresa |
Relación con el concurso de acreedores
En casos de insolvencia, el cierre puede ir acompañado de un procedimiento de concurso de acreedores.
Este mecanismo busca proteger a los acreedores y evitar una liquidación desordenada. Si la empresa no puede pagar, se aplican medidas específicas para repartir los activos de forma justa y, en algunos casos, facilitar la venta de la unidad productiva.
Cuánto tarda cada fase
- Disolución: suele completarse en semanas, dependiendo de la rapidez en la convocatoria de socios y la inscripción en el Registro Mercantil.
- Liquidación: puede durar meses o incluso años, dependiendo del volumen de activos, deudas y complejidad del patrimonio.
Para casos concretos, puedes revisar nuestra guía sobre cuánto tarda una empresa en pagar la liquidación.
Ejemplos prácticos
Caso 1: Disolución sin deudas
Una sociedad decide cerrar porque sus socios quieren iniciar nuevos proyectos. Se aprueba la disolución, se liquida el pequeño patrimonio y en pocos meses se inscribe la extinción.
Caso 2: Liquidación con activos complejos
Una empresa en liquidación posee varios inmuebles y contratos vigentes. El proceso se alarga porque es necesario vender propiedades y resolver obligaciones contractuales.
Caso 3: Insolvencia y concurso
Una compañía con deudas significativas entra en concurso de acreedores y posteriormente en liquidación, siguiendo un plan ordenado de pago a los acreedores.

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Aspectos legales clave
En la disolución
- Convocatoria de junta general para aprobar la disolución.
- Nombramiento de liquidadores.
- Inscripción del acuerdo en el Registro Mercantil.
En la liquidación
- Elaboración de inventario y balance inicial.
- Venta de activos y cobro de créditos pendientes.
- Pago de deudas en el orden establecido por la ley.
- Presentación de cuentas finales y escritura de extinción.
Puedes ampliar esta información en nuestro artículo sobre aspectos clave en la liquidación de una empresa.
Importancia de contar con asesoría especializada
Un cierre mal gestionado puede derivar en responsabilidades para los administradores o en reclamaciones judiciales. Por eso, contar con un equipo experto como Gestores Concursales garantiza un proceso eficiente, cumpliendo con la normativa y evitando riesgos innecesarios.
Nuestros especialistas en disolución de empresas en España y liquidación de empresas te acompañan desde el inicio hasta la inscripción final en el Registro Mercantil.
Las diferencias entre disolución y liquidación de una empresa radican principalmente en el momento del proceso y en sus objetivos. La disolución es el inicio formal del cierre, mientras que la liquidación es la etapa final en la que se saldan deudas y se reparte el patrimonio.
En Gestores Concursales contamos con abogados y economistas especializados para ayudarte en cada paso, evitando problemas legales y asegurando un cierre ordenado y eficiente.