Cuando una empresa entra en fase de liquidación, no solo se trata de vender activos y pagar deudas. También es necesario decidir qué ocurre con los contratos vigentes y cómo se gestiona la relación con los proveedores.
En este artículo, desde la experiencia de Gestores Concursales, explicaremos qué dice la ley, cuáles son las opciones para tratar estos compromisos y cómo gestionarlos de forma ordenada para evitar conflictos legales y financieros.
Contenido:
ToggleQué implica la liquidación de una empresa
La liquidación es la fase posterior a la disolución de una empresa en la que se venden activos, se pagan deudas y se distribuye el remanente entre los socios. Durante este proceso:
- La empresa ya no puede realizar nuevas operaciones ordinarias.
- Sí puede ejecutar actos necesarios para vender bienes, cobrar créditos o cumplir compromisos pendientes.
- Los liquidadores asumen el papel de administrar la sociedad, sustituyendo a los administradores.
En el caso de empresas con problemas financieros, la liquidación puede ir de la mano de un concurso de acreedores para ordenar los pagos.
Situación de los contratos durante la liquidación
Contratos que continúan
Si un contrato es esencial para mantener el valor de los activos o completar trabajos en curso, puede mantenerse vigente hasta su finalización. Esto suele ocurrir con:
- Contratos de arrendamiento de inmuebles.
- Contratos de mantenimiento necesarios para conservar maquinaria.
- Contratos de servicios públicos (electricidad, agua, internet).
Contratos que se rescinden
Cuando los contratos no son necesarios para la liquidación, pueden rescindirse siguiendo las cláusulas pactadas.
- Si existe penalización por cancelación anticipada, deberá evaluarse su impacto económico.
- En caso de concurso de acreedores, algunas penalizaciones pueden no ser exigibles.

Te ayudamos a liquidar tu empresa con deudas
Cuando una empresa no puede continuar sus operaciones, la liquidación es el paso necesario para cerrar correctamente su actividad. Somos Mónica y Leticia, especialistas en liquidación y concursos de acreedores.
Relación con los proveedores
Pagos pendientes
En la liquidación, los proveedores son acreedores y tienen derecho a cobrar según el orden de prelación establecido por la ley. Esto significa que:
- Primero se pagan créditos contra la masa (gastos indispensables del procedimiento).
- Luego los créditos privilegiados, ordinarios y subordinados.
Más detalles sobre este orden se explican en nuestra guía de aspectos clave en la liquidación de una empresa.
Continuidad de suministro
En algunos casos, aunque exista deuda, el proveedor puede seguir suministrando si se considera esencial para liquidar activos. Esto debe acordarse explícitamente.
Tabla: opciones para contratos y proveedores en la liquidación
Situación | Opción principal | Impacto en la liquidación |
---|---|---|
Contrato esencial para finalizar proyecto | Mantenerlo hasta su cumplimiento | Aumenta el valor del activo final |
Contrato no esencial | Rescindirlo según condiciones pactadas | Reduce gastos |
Proveedor con deuda pendiente y servicio necesario | Negociar continuidad con pago parcial o garantía | Mantiene operaciones clave |
Proveedor con deuda pendiente y servicio prescindible | Finalizar relación | Evita acumular más deuda |
Ejemplos prácticos
Caso 1: Contrato de arrendamiento
Una empresa en liquidación tiene alquilado un local donde se almacena maquinaria pendiente de vender. Se mantiene el contrato hasta que se concreta la venta para evitar costes de traslado y daños.
Caso 2: Proveedor de materias primas
La empresa ya no fabrica, por lo que el contrato de suministro se cancela. El proveedor pasa a ser acreedor por las facturas impagadas y cobra según el orden legal.
Caso 3: Servicios esenciales
Un proveedor de software mantiene el acceso al sistema de gestión durante la liquidación a cambio de un acuerdo de pago reducido, facilitando la venta de la base de datos de clientes.
Cómo evitar conflictos con proveedores
- Comunicación temprana: informarles de la situación y de cómo se gestionarán sus créditos.
- Negociación clara: acordar plazos y condiciones para pagos o continuidad de servicios.
- Documentación: dejar constancia por escrito de cualquier acuerdo.

Obligaciones legales de los liquidadores
Los liquidadores deben:
- Elaborar un inventario y balance al inicio de la liquidación.
- Cumplir los contratos vigentes que sean necesarios.
- Rescindir los contratos prescindibles respetando las condiciones legales.
- Pagar a los acreedores siguiendo el orden establecido.
Si la empresa no puede pagar, se recomienda iniciar un procedimiento de concurso para proteger a los administradores y ordenar los pagos.
Papel del concurso de acreedores en contratos y proveedores
En un concurso:
- Se pueden suspender contratos si no benefician al procedimiento.
- Los proveedores se clasifican como acreedores concursales y cobran según la prelación.
- Algunas penalizaciones por rescisión pueden quedar sin efecto.
Este mecanismo está regulado para evitar que unos acreedores se vean más perjudicados que otros.
Importancia de la asesoría profesional
Gestionar contratos y proveedores en la liquidación requiere conocimiento legal y experiencia en negociación. En Gestores Concursales ayudamos a:
- Analizar cada contrato y decidir su continuidad o rescisión.
- Negociar con proveedores para mantener servicios esenciales.
- Cumplir con las obligaciones legales y evitar responsabilidades personales.
Nuestros servicios de liquidación de empresas incluyen este análisis detallado para optimizar el proceso.
En una liquidación, los contratos y la relación con proveedores deben gestionarse con cuidado para proteger el valor de los activos y cumplir la ley. Mantener o rescindir un contrato depende de su utilidad en el proceso y de su impacto económico.
En Gestores Concursales contamos con el equipo legal y económico necesario para planificar cada paso, garantizando que la liquidación sea ordenada, eficiente y sin riesgos para administradores o socios.